Según el Tribunal de Disciplina, una vez evaluados los descargos, Liniers fue “responsable de los desórdenes que motivaron que el encuentro no pudiera seguir disputándose, sin garantizar de manera suficiente la seguridad del partido”. Asimismo, el estadio Hernán Sagasti fue suspendido por 7 jornadas a nivel provincial y cada club multado en 10 AJC.
El encuentro, una vez finalizado el primer tiempo (con victoria de Liniers por 47-46), no se reanudó por cuanto camino a los vestuarios un grupo de simpatizantes locales agredió a jugadores y cuerpo técnico de Los Millonarios provocándoles heridas y traumatismos de consideración. En esas condiciones los árbitros Rafael Cajaravilla (Necochea) y Lucas Bianco (Tres Arroyos) decidieron suspender el partido por falta de garantías.
El fallo del Tribunal de Disciplina, estableció:
1) Dar por perdido el partido al Club Liniers de Bahía Blanca por ser responsable de los desórdenes que motivaron que el encuentro no pudiera seguir (Artículos 71 del Código de Penas, incisos 5 c y 6 a).
2) Aplicar al Club Liniers de Bahía Blanca la sanción de clausura de su estadio por siete partidos por los desórdenes señalados (Artículo 62 del Códido de Penas).
3) Aplicar a ambos clubes la multa de 10 AJC por la participación de sus representativos y espectadores en la gresca generalizada (Artículo 60 del Código de Penas, inciso c).
Fuente: Webasketball
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